Los robots
son por naturaleza mecánicos, fríos, insensibles. Pero un nuevo desarrollo
científico podría en el futuro hacerlos sentir. Un equipo de científicos
estadounidenses y chinos logró imitar artificialmente el sentido humano del
tacto, lo que dicen podría ayudar a dotar a los robots con este sentido
primario.
Se trata de
sensores elaborados con nanocables de óxido de zinc, formando una matriz de
8000 transistores. Semejante avance, aseguran los investigadores, podría
acelerar el desarrollo de piel inteligente artificial que permitiría
"sentir" actividad en una superficie. El desarrollo se suma a otros
de Intel e IBM, que investigan la denominada computación perceptiva , es decir,
agregar en las computadoras los sentidos de los que gozan los humanos.
Los sensores,
consisten en unos transistores capaces de producir independientemente una señal
electrónica cuando se los somete a tensión mecánica. Los transistores sensibles
al tacto, llamados taxels, tienen una sensibilidad comparable a la de un dedo
humano.